C10 Cobrarle la deuda a la Familia Long
Capítulo 10 - Cobrarle la deuda a la Familia Long
No lejos de allí estaba el secretario general Ning, cuyos ojos emitieron cierta perplejidad: ¿Cuándo este bastardo empezó a tener relaciones con la familia Long? ¿Podría ser que el método funcional otorgado por la familia Long?
Pensando en esto, una sonrisa fría apareció en los labios del secretario. Lo que la primera dama le había encargado iba a tener resultados por fin.
El Marqués de Guanjun y la Familia de Long andaban por caminos diferentes, así que con tal de poder demostrar que el método funcional de Ning Qi fue transmitido por la familia Long, el Marqués de Guanjun , de acuerdo con su propio temperamento, iría, al menos, a paralizar a Ning Qi todo el cultivo que tenía, ¡ni que decir era posible que le golpeara a muerte!
¡Bang! ¡Bang! ¡Bang! Ning Qi extendió la mano y tocó fuertemente la puerta de la Familia Long.
"¿Quién es? ¡Qué descomedido! ¡¿Sabes que aquí está la familia de Long ?!"
Un anciano abrió lentamente la puerta y echó un vistazo al exterior, cuando estaba a punto de cerrar la puerta, Ning Qi dio un paso adelante, presionó la puerta con la mano y le preguntó: "¿Estás ciego?"
Era como si el anciano acabara de ver a Ning Qi, le lanzó una mirada desdeñosa y dijo:"¿De dónde viene este chiquito? ¿Por qué llamas a la puerta? ¡Lárgate rápido!"
Con eso, estaba a punto de cerrar la puerta, pero se dio cuenta de que era incapaz de hacerlo. Al ver el gas luchador de plata surgiendo desde las manos de Ning Qi, le dio un vuelco en el corazón y frunció el ceño, dijo:"¿gas luchador singular? ¿Usted es? "
Ning Qi dijo: “Vete y llama a Long Er. Dile que el acreedor ha llegado a cobrar la deuda."
"Diácono Long Er?"
El anciano se sobresaltó, luego asintió con la cabeza: “Por favor espere un momento, voy a llamar al diácono Long Er."
Dentro de poco, Long Er apareció delante de Ning Qi, este se burló: “Es realmente difícil entrar en la casa de su familia. Menos mal, no voy a entrar. ¿Está listo el dinero?"
Cuando Long Er vio a Ning Qi, una mirada de incomodidad se reveló en su rostro: “Pues... he dicho al Mayor del Clan sobre lo ocurrido, pero él no está de acuerdo con el precio. Señorito Ning, ¿le importaría que sea un poco menos?"
Ning Qi:"¿Cuánto menos?"
Long Er:"¿Está bien con diez mil?"
Ning Qi:"¿Ciento cuarenta mil platas? Está bien. ¡Dámelas rápido!"
La cara de Long Er su puso un poco enrojecido: “Pues... es un total de diez mil."
Ning Qi se sintió furioso:"¿Me tratan como al mendigo?"
La guardia vieja, al escuchar la conversación entre ellos dos, se sorprendió mucho. ¿Desde cuándo la familia de Long debió a alguien ciento cincuenta mil platas? ¡No era un número pequeño!
Long Er rio para pedir disculpas: “Señorito Ning, fue el Mayor del Clan quien tomó la decisión, los demás ni la podemos cambiar. Aquí están las diez mil platas que he preparado bien hace mucho tiempo, por favor, acéptelo."
Mientras hablaba, entregó un billete de plata con el sello real en él, que se leía 'Banco de Qin Tang'. Se decía que fue abierto por miembros de la familia imperial y que tenía mucha credibilidad.
Al ver que Ning Qi lo aceptó, Long Er dejó escapar un suspiro de alivio en el corazón.
"Pues este lo voy a tomar como intereses, los ciento cincuenta mil de platas los tienen que entregarme hoy, ni un solo centavo menos. De lo contrario, iría a hacer la denuncia sobre lo sucedido ante los funcionarios. Ya que tengo el pagaré en la mano, cuando llegue el momento, toda la capital va a informarse de que la familia Long es un sinvergüenza, a ver cómo van a reaccionar ante esto.
Dijo Ning Qi.
Una ira instantánea pasó por la cara de Long Er.
"¡Qué gran tono tienes! Así que eres el tipo del que Long Er habló, ¿el que pescaba en río revuelto? ¿El decimotercer hijo del Marqués de Guanjun, ese bastardo de la sirviente humilde?"
Un joven vestido de blanco se acercó con una mujer hermosa. Detrás de ellos siguieron un niño y una niña.
"Noveno joven amo. Señorita Qing Xuan."
Long Er se inclinó a los dos.
¿Qing Xuan?
Las dos palabras conmovieron un poco el corazón de Ning Qi. Esa chica debería ser Zhantai Qingxuan, que disfrutaba de un gran nombre en la capital. Empezó a cultivar métodos y técnicas a partir de los tres años de edad. Cuando cumplió los siete, ya era luchador. Después, se convirtió en luchador experto a los diez y gran experto a los trece. Ahora que tenía dieciséis años de edad, llegó a gran experto de cumbre. Era la única genio de la familia de Zhantai y contaba con mucho cariño por parte del emperador, y, además, ¡discípula de la secta Qinglan! Tenía tanto renombre que cada vez regresó a la capital, se envolvió por una gran cantidad de chicos provenientes de las familias aristocráticas.
Se oyó que Ning Yan era también uno de los pretendientes de ella.
Ning Qi pensaba mientras observaba a Zhantai Qingxuan, de una manera extremadamente descortés por la consideración de los demás.
"Noveno hermano, hermana Qingxuan, ¡este es el bastardo!"
Los dos mocosos extendieron sus dedos gordos señalando a Ning Qi, asimismo pusieron morros con aspectos muy enojados.
Long Aotian, que llevaba tiempo irritado por la mirada de Ning Qi hacia Zhantai Qingxuan, hizo un grito:"Cabrón, ¿dónde estás mirando? ¿Crees que puedes mirar a la señorita Qingxuan tan a la ligera?"
Zhantai Qingxuan arrugó un poco las cejas, volvió ligeramente el cuerpo y, con un rastro de disgusto cruzando por los ojos, dijo en voz baja: “Si el noveno señorito tiene asuntos que atender por ahora, voy a partir para allí primero, para evitar que la gente espere con ansiedad."
Long Aotian sonrió de inmediato en tono de disculpa:"Qingxuan, espere un momento, voy a resolver esto de inmediato."
Palabras terminadas, frunció el ceño y dirigió la mirada hacia Ning Qi:"Long Er te ha dado el billete de plata, ¿verdad? ¡Lárgate de una vez! Si continúas molestándonos, voy a romper tus piernas de perro."
Ning Qi lo miró con calma y dijo: “Acabas de decir que mi madre es una sirviente humilde y que soy un bastardo, y ahora incluso me ordenas apartarme, lo cual, si lo digan a una persona ajena, vaya a pensar que la familia de Long está al mando de tí. Yo, Ning Qi, no tengo mucho talento, pero todavía quiero medir fuerzas con usted. Si me vence, saldré ahora mismo sin decir nada."
Después hizo una pausa y continuó:" No obstante, si usted pierde, voy a devolverle las maldiciones y me tendrá que dar otras quince mil platas, ¿está de acuerdo?"
A lo lejos, el secretario general Ning, siendo testigo de todo lo ocurrido, tenía la capacidad auditiva suficiente para escuchar la conversación entre ambas partes y sintió una gran alegría. Por lo visto, Ning Qi no tuvo relaciones complementarias con la familia de Long sino vínculos antagónicos; Long Aotian es gran experto de una estrella, de modo que, al parecer, no hubo necesidad de que la primera dama haga algo y ese tipo desaparecerá sin problemas, incluso con la parte del Viejo Maestro.
Al enterarse de esto, a Long Aotian le parecía como si hubiera oído una gran broma:"¿Tú? ¿Quieres medir fuerzas conmigo? ¿No sabes tu propia identidad?"
En ese momento, Long Er caminó hacia adelante y susurró algo a Long Aotian, quien, después de escuchar lo dicho, cambió ligeramente su expresión y alteró la mirada a Ning Qi:"¿Has podido hacer escapar al gran experto de la secta de Exterminio Sangriento? Interesante... Pero ya que Long Er no lo vio en persona, creo que está mintiendo. "
Se congeló ligeramente la mirada de Zhantai Qingxuan. ¡Secta de Exterminio Sangriento!, una secta grande que está a la par con la Qinglan. Ning Qi... ¿no es el inútil de la mansión del Marqués de Guanjun? Dicen que ni siquiera ha llegado al luchador, ¿cómo puede hacer huir a un gran experto de la secta de Exterminio Sangriento?
Ning Qi:"¿Algún problema? ¿Tienes miedo?"
Long Aotian dijo:"¿Te tengo miedo? ¡Qué ridículo! Sígueme, voy a dejar que todos los discípulos de la familia Long vean cómo el descendiente directo de la mansión del marqués se arrodilla y pide perdón"
"Qingxuan, también puedes venir. Voy a derrotarlo pronto." dijo Long Aotian.
Zhantai Qingxuan había perdido la paciencia en un principio, pero de momento, se sintió un poco curiosa sobre lo que estaba pasando, de manera que asintió con la cabeza.
Ellos llegaron a la Cancha de Artes Marciales de la familia Long.
Al ver que la puerta de la familia se cerró lentamente, el secretario general Ning decidió esperar el resultado en las afueras. Si Long Aotian lograra matar a Ning Qi, sería un fin agradable para todo el mundo.
"¡Noveno hermano! ¡Señorita Qingxuan!"
"¡El Noveno! ¡Oh, mis respetos a la señorita Qingxuan!"
En la Cancha de Artes Marciales, los centenares de descendientes y discípulos de la familia Long dejaron lo que estaban haciendo y se inclinaron para saludar a ellos dos.
Long Aotian podría clasificarse entre los primeros tres de los de su generación, y con respecto a Zhantai Qingxuan, su identidad era aún más ilustre.