C19 Simio llameante

Capítulo 19 - Simio llameante

A una pulgada de distancia Li Mochou posó su palma sobre la cabeza de Qiu Baishou.

"No me pueden matar. Si muere un diácono de la secta de Exterminio Sangriento, de seguro enviarán decanos para investigar a fondo este asunto. ¿Por qué no convertimos la enemistad en amistad y nos olvidamos de todo esto? Lo que pasó fue solamente un malentendido."

Qiu Baishou consideraba que Ning Qi no se atrevería a matarlo por el miedo a la secta de Exterminio Sangriento que tenía como respaldo y sus ojos brillaron de consuelo y alegría.

"¡Dieciocho palmas de sumisión al dragón!"

Sonriendo alegremente, Ning Qi caminó frente a Qiu Baishou que era gravemente lesionado y, sin decir nada, lanzó una palmada con toda su fuerza. La cabeza de Qiu Baishou se explotó con un ruido colosal como si fuera una sandía que había caído del décimo piso.

"¡Felicidades al anfitrión! Ha matado con éxito al luchador espiritual de una estrella. Dado que el rango del objeto matado es más alto que el del anfitrión (la matanza se realiza de forma supera-nivel), se duplica el EXP obtenido, así que obtiene un total de 40.000 puntos de experiencia."

No pasó mucho tiempo desde que Ning Qi había logrado subir de un nivel, y ahora ¡obtuvo otros 40.000 puntos de experiencia adquiridos! ¡Ahora solo le faltaban 60.000 puntos para subir un nivel más!

"¡Ding, felicidades al anfitrión! ¡Obtiene un paquete de regalo de apuesta!"

"Jaja, de verdad es así." El sistema había advertido que la matanza hecha por la figura invocada no permitiría obtener ningún paquete de regalo de apuesta. Informado de esto, esta vez Ning Qi mandó a Li Mochou que se detuviera y dio el golpe final por sí mismo, por lo que ¡realmente apareció un paquete de regalo de apuesta!

Sin embargo... Este paquete de regalo parecía ser un poco extraño.

"Gracias por participar…"

"Gracias por participar…"

Había nueve opciones consecutivas de gracias por participar.

Cuando Ning Qi pensó que el sistema le estaba jugando una broma, apareció la décima opción: 2000 modenas de matanza de dragones.

"¿No te has confundido? ¿Puede un luchador espiritual disponer de 2.000 monedas de matanza de dragones? Por otra parte, la posibilidad de ganar el regalo es demasiado baja." Ning Qi estaba un poco indeciso y no pudo evitar chuparse los labios. No sabía si era mejor que lo abriera ahora o después de 24 horas.

Por el momento mostró cierta preocupación por las ganancias y pérdidas.

"¡Hey! De cualquier manera tengo que abrirlo. ¿Para qué me preocupo por esto?"

Utilizó la conciencia para iniciar el juego de apuesta.

La rueda comenzó a girar rápidamente. Cada vez que la aguja pasaba por las opciones de 'gracias por participar' hizo que su corazón latiera rápido.

"¡Sí, sí, sí! ¡Por favor!"

Ning Qi tomó su medida de reserva de -hacer plegarias-. Tal vez se debiera a que gritó tan fuerte, que el sistema le dio la cara: el puntero se detuvo lentamente en la opción de 2.000 monedas de matanza de dragones.

"¡Ding, felicitaciones al anfitrión! ¡Obtiene 2.000 monedas de matanza de dragones! "

La voz de notificación era como si fuera un sonido del paraíso. Ning Qi se rio a carcajadas contentamente, se acercó al lado de Li Mochou y, con la expresión un poco alterada, tomó su cintura, dispuesto a besarla en su cara. Al instante Li Mochou reapareció a diez metros de distancia mirándolo con frialdad:"Joven héroe, por favor, compórtese."

Ning Qi rio secamente y dijo:"Estoy extremadamente emocionado, extremadamente emocionado, jajaja."

Pensó: Parece que es cierto que la invocada no se puede utilizar casualmente. ¿Podría ser que es temporal? Le preguntó al sistema sobre esto, pero no obtuvo respuesta.

Cinco minutos pasaron rápido. Con una explosión, Li Mochou se convirtió en una masa gaseosa de color púrpura y se disipó en el aire.

Ning Qi chequeó la cantidad de dinero que se requería para invocarla de manera permanente y de verdad necesitaba 10.000 monedas, así que por el momento no le quedaba remedio para tener relaciones íntimas con ella.

Esta vez, aparte de conseguir matar a dos tipos de la secta de Exterminio Sangriento, obtuvo de paso 2.0000 monedas de matanza de dragones. Tenía actualmente un total de 2.200 monedas, lo que podría decir que por fin logró la compensación por las pérdidas sufridas anteriormente.

Un día después.

Ning Qi oyó de repente un hervidero de voces humanas acercándose, las cuales le eran muy familiar.

"¡A cercar a este simio llameante¡ ¡Rápido!"

"No lo dejen volver a la montaña. Jaja, es una bestia monstruosa del rango IV. Mientras lo capturemos vivo, nuestro puesto en la mansión del Marqués de Guanjun esta vez no bajará."

"¡Tengan cuidado con el fuego extraño que escupe! Es el 'fuego de oro fluyente', que ocupa la posición número 136 del mundo, capaz de volvernos cenizas! "

Ning Qi entrecerró los ojos y levemente asintió con la cabeza -ya había tomado una decisión en su mente-. Sin hacer ningún ruido, llegó de manera furtiva y apartó las ramas para observar la situación delante suyo.

Se vio claramente que Ning Yan, junto con otros tres jóvenes del rango luchador de cumbre, estaban enfrentándose con un simio gigante de más de tres metros de altura, mientras que los otros se encargaban de cubrir a ellos cuatro.

El simio gigante tenía el pelo rojo ardiente, que cubría todo su cuerpo. Tenía en su cola una masa de llama brillante, que emitía una temperatura aterradora. Lo más importante era que había sangre en su abdomen, así que debía estar gravemente herido. De lo contrario, cómo podría ser situado una bestia del grado bajo del rango IV, que equivalía a un luchador espiritual de una estrella, por un gran luchador de una estrella junto con tres luchadores experto de cumbre y otros seguidores irrelevantes?

De repente, Ning Yan arrojó hacia el simio llameante una red de oro púrpura, la cual podía quemar incluso el fuego de oro fluyente en su cola.

"Sé que entiendes el lenguaje humano. Deja de luchar ya. Esta red de oro púrpuro es un instrumento luchador del grado medio del nivel abstruso. Fue elaborada por un maestro de refinación que mi madre invitó gastando millones de taeles de plata. No se puede quemar incluso por fuegos alienígenos del rango más alto, ¡ni siquiera por el tuyo!"

Ning Yan dijo con risas burlescas.

Los ojos del simio llameante acusaron un rastro de desesperación. Poco a poco, se tranquilizó y dejó de forcejear.

"Jaja, ¡se entregó!"

"¡Por fin nosotros los de la mansión del Marqués de Guanjun podemos disfrutar de la gloria esta vez! Los de las otras familias no serían capaces de capturar a una bestia monstruosa del rango IV con vida."

"Por supuesto. A menos que se encuentren con una bestia del rango IV gravemente herida. Jajaja."

Los tres luchadores experto de cumbre empezaron a reír orgullosamente.

En la cara de Ning Yan se reveló una sonrisa de satisfacción. Agitó la mano y dijo:"Que todos se calmen. He decidido llevarlo directamente al Valle de Hoja Seca y reunirnos con el Noveno Príncipe."

Ning Dong, hijo mayor de la segunda concubina y uno de los tres luchadores experto de cumbre, preguntó dudoso:"Ning Yan, ¿estás diciendo que no vamos a participar en el Día de Caza?"

Ning Yan asintió con la cabeza:"Con él ya es suficiente. Si lo llevamos con nosotros para asistir a los eventos de los días siguientes, temo que seamos capturados por los otros en vez de capturar a los otros.

"Sí, tienes razón. Estoy de acuerdo."

Ning Dong dio una señal con la cabeza.

Siendo descendientes y discípulos de la mansión del Marqués de Guanjun, ellos entendían la simple verdad de que sin pérdidas no había ganancias. Sin embargo, en este momento, desde atrás se abalanzó un bulto que tomó la red de oro púrpura y escapó corriendo rápidamente, dejando solo una imagen de su espalda gallarda.

El simio llameante se aprovechó de la oportunidad para saltar por encima de las cabezas de la gente y correr montaña arriba.

"¡Maldito idiota! ¡El simio llameante! ¡Mi red de oro púrpura!"

Ning Yan rugió con gran enojo pero no pudo tener más remedio que ver al simio llameante corriendo monte arriba.

"¿Quién es ese tipo? ¡¡Juro que voy a cortarlo en mil pedazos!!"

Ning Dong lanzó un puñetazo a un árbol que tenía como perímetro sobre dos brazos, y el tronco fue destruido inmediatamente, lo cual podía poner en evidencia lo furioso que se había sentido. Lo mismo pasó más o menos con los otros miembros de la familia Ning.

"¡Es Ning Qi! ¡Reconozco su espalda!"

Un luchador de siete estrellas se despertó de golpe.

Al oír esto, Ning Yan se sorprendió por un momento. ¿Como puede ser Ning Qi? ¿Acaso el séptimo tío aún no ha conseguido matarlo? Pero, ha llevado consigo a aquel de la familia Shentu, ¿será que todavía no pueden conquistar a un mero luchador experto de cuatro estrellas?

"¡Basura!"

Ning Yan maldijo en voz baja.

"Sí, Ning Qi no es más que una basura. ¡Vamos a capturarlo y darle una lección!" Dijo Ning Dong en voz alta.

Los otros le dieron la razón. A pesar de que Ning Yan también deseaba desollar a Ning Qi en persona, los impidió diciendo:"De momento, lo más importante es el Día de Caza. En cuanto a ese inútil, será mejor que no le dediquemos mucha atención por ahora."

Temía que Ning Hongdu y Shentu Feng necesitaran más tiempo para encontrar los rastros de Ning Qi. Por lo tanto, a pesar de odiar a Ning Qi con toda su alma, se vio obligado a impedirles buscar problemas con Ning Qi. Si interrumpían los asuntos de Ning Hongdu y Shentu Feng, acabarían por obtener más pérdidas.

"Siempre y cuando este bastardo se muera, mi madre no tendrá nada más de que preocuparse, y en la mansión del Marqués de Guanjun, ¡nadie podrá amenazar mi estatus!"

"Si sigues siendo un inútil del rango Ejercicio, yo, como tu hermano mayor, no te haré daño a pesar de que no me agradas. Si quieres culpar a alguien, ¡debes culparte a ti mismo!"