C54 Contraemboscada

Capítulo 54 - Contra-emboscada

Cuando la familia Sun estaba planificando para la muerte de Ning Qi, en la capital, Huangfu Fei reunió a todos sus confidentes.

"Vayan de inmediato a investigar el paradero de Huangfu Juesha, y si se encuentran con Ning Qi, ¡mátenlo directamente!"

Huangfu Fei dijo con frialdad.

"¡Sí!"

Dijeron al unísono cinco luchadores espirituales.

Después de que se fueron, Huangfu Fei dejó revelar por su cara un poco de sospecha:"Juesha es luchador espiritual de una estrella y su machetazo de viento impetuoso alcanza el quinto piso ya, ¿por qué se pierde la noticia sobre él?"

Había llevado tres meses esperando ansioso la vuelta de Huangfei Juesha. Antes, se imaginaba que no tardaría en regresar con la cabeza de Ning Qi, pero pasaron los días, desapareció misteriosamente sin que se pudieran encontrar sus huellas, ni qué decir a Ning Qi.

"Podría ser el Viejo Maestro de Ning..."

Un destello de recelo pasó rápidamente por los ojos de Huangfu Fei, quien había realizado una averiguación antes de lo relativo a los poderosos de la mansión de Ning. El Marqués de Guanjun estaba en la capital, y el tercer señor, en la mansión de ese hijo, solamente el Viejo Maestro Ning, no se podía asegurar dónde estaba. Sin embargo, si de verdad fuera hecho por el Viejo Maestro, ¡hubiera venido en persona a pedir el perdón!

"En todo caso, ¡al que ofende a Huangfu Fei no le queda otra opción que morir!"

Lanzó una risa burlona.

...

Al cabo de medio mes.

Ning Qi salió de la habitación de refinación lleno de energía.

Zhang Long y Zhao Hu se sorprendieron. ¿La refinación de píldoras no era un trabajo muy exhasutivo? En caso de Ning Qi, sin embargo, había pasado quince días consecutivos refinando píldoras, ¿porqué siguió tan dinámico como uno que acabara de despertar?

Huésped: Ning Qi.

Rango: luchador experto de cumbre.

EXP: 0/500.000 (980.000 puntos restantes).

Método funcional: invención de dragón y elefante del piso III, nivel de dominio 384／10.000.

Técnica marcial: dieciocho palmas de sumisión al dragón del piso III, nivel de dominio 4.567/10.000.

Refinación de píldora: refinador de píldora del rango III, nivel de dominio 15.580/100.000.

HP: 12.350.

Moneda de matanza de dragones: 1.000.

Al alcanzar el rango III, el refinador Ning Qi ya estuvo calificado para refinar píldoras nutritivas para el espíritu del grado alto del nivel amarillo, sin embargo, su remedio requería de dos mil monedas de matanza de dragones, diez veces más caro que el de la píldora del grado mediano, mientras que las 1.000 modenas restantes Ning Qi las tenía que guardar para invocar a Li Mochou si quería matar al líder de ladrones de calavera.

Por lo tanto, no le quedó otra medida que esperar más tiempo para reunir suficiente dinero en el futuro.

"Zhang Long, Zhao Hu, acérquense y escuchen."

Ning Qi hizo un gesto con la mano.

Los dos se mostraron dudosos, pero no tardaron en adelantarse al lado de Ning Qi y bajar su cabeza.

Ning Qi dio unas instrucciones a su oído, y ellos se marcharon al asentir con la cabeza.

"¡Se nota movimiento! Son guardias del refinador de píldora, Zhang Long y Zhao Hu."

"Síguelos, y yo sigo con la vigilancia."

"¡Sí!"

No mucho tiempo después, se vio que Zhang Long y Zhao Hu regresaron con un carro de caballo, del que sacaron luego varias cajas y las trasladaron al patio.

"¿Qué compraron?"

"¡Frascos de píldora!"

"¡Avísalo rápido al líder!"

Mansión del General Taba.

Un gran experto de cumbre estaba de medio rodillas ante Taba Han y le dijo en voz baja:"Joven maestro, ¡Zhang Long y Zhao Hu han comprado muchos frascos de píldora hoy bajo el mando de Ning Qi!"

Taba Han sonrió levemente y se puso de pie:"¡Infórmalo a los hermanos que nos llega un gran negocio!"

"¡Sí!"

Después de un rato, salieron del condado las muchas tropas de la mansión de Taba con diferentes razones, quienes se adentraron en bosques y bloquearon los diversos senderitos. Se quitaron sus ropas en el acto y las quemaron con fuego, luego, ya con ropas negras puestas, tiraron de máscaras de calavera y las pusieron sobre sus caras.

A continuación, este grupo se quedó en silencio al acecho como si fueran muertos, ¡sin poder darse cuenta de un ratón que pasaba por su lado!

...

"Vuelvan ustedes a trasladarlos al carro. "

Ning Qi mandó con un dedo señalando los frascos vacíos.

Zhang Long y Zhao Hu se sintieron dudosos al ver los frascos sin ninguna píldora adentro, pero, ya que no se atrevieron a preguntar más, los trasladaron al carro de caballo obedeciendo la orden.

Y después, Ning Qi salió del patio en su caballito blanco. Hizo un llamamiento a Zhang Long y Zhao Hu, y los dos lo siguieron atrás conduciendo el carro rumbo a las afueras del condado de Wuyang.

Al caminar unos ciento cincuenta kilómetros, se vieron cada vez menos pueblos.

Montando relajado en el caballito blanco, Ning Qi recorrió su mirada a su alrededor mientras murmuraba.

"Uno... dos... tres... treinta y cinco..."

Numerosas barras de sangre saltaron ante la vista de Ning Qi desde los bosques recónditos.

"Cien personas de gran experto de cumbre... Con el fin de formar tantos poderosos, no es de extrañar que la familia Taba tiene que defraudar fondos estatales y saquear por todos los lados."

Ning Qi se sorprendió en el interior.

Según lo que sabía, incluso en la mansión del Marqués de Guanjun el número de los de gran experto de cumbre no era más que veinte y pico, y mucho más inferiores que los ladrones de calavera.

El arte de escondite de ellos, sin embargo, al parecer de Ning Qi, no era más que una broma. De golpe hizo que el caballito se detuviera.

"Estoy cansado. Vamos a descansar por aquí."

Dijo Ning Qi.

¿A tan solo ciento cincuenta kilómetros? No debería ser así.

Zhang Long y Zhao Hu estaban en duda, pero por otra parte sintieron que Ning Qi tenía algo misterioso ocultado.

Al ver que la presa paró a unos centenares de la trampa, Taba Han echó una risa fría detrás de la máscara e hizo un gesto con la mano. Sus hombres se arrojaron de inmediato hacia Ning Qi y en un soplo los rodearon a ellos tres.

"¡Ladrones de calavera!"

¡Zhang Long y Zhao Hu se quedaron extremadamente asombrados!

Zhao Hu lanzó un rugido de ira:"Maestro Ning, váyase primero, ¡Zhang Long y yo nos encargamos de resistirlos!"

Una determinación brilló en los ojos de Zhang Long, quien todavía quería tratar de salvar la vida frente a los ladrones de calavera, por lo que dijo:"Ustedes, nuestro Salón de Cien Hierbas no ha tenido relaciones con los ladrones de calavera, ¿qué significa este hecho?"

"¿Qué significa? Jejeje ..."

Los miembros crearon una vía de la que salió Taba Han sonriéndose ligeramente, detrás de la máscara era un par de ojos maliciosos y codiciosos.

"Entréguenme todas las píldoras, y si me queda bien, tal vez los podré dejar salir."

Ning Qi bajó su cabeza y echó una risa:"Taba Han, no sé si te queda bien o mal, solo yo sí me encuentro con buen ánimo."

Al escuchar "Taba Han", Zhang Long y Zhao Hu se miraron a la recíproca medio sospechosos con miradas llenas de asombro.

Lo mismo pasó con el resto de los ladrones de calavera, a quienes se pudo notar un visible cambio en su potencia.

Detrás de su máscara de calavera, se trastornó la expresión de Taba Han:"¿Cómo es posible que ese hijo sepa la otra identidad mía? ¿Acaso ha hecho esta trampa para atraer mi atención?"

Pensando en eso, Taba Han miró vigilante a su alrededor. Al descubrir que por aquí solo se hallan Ning Qi y sus dos guardias, se tranquilizó mucho.

Fijó una mirada fría en Ning Qi, en la que se desbordaba su intención de matar:"No entiendo lo que has dicho, pero me siento muy mal ahorita, por eso, ¡mátenlos!"

A su orden, los subordinados se lanzaron en silencio hacia ellos tres, y sobre todo Taba Han, quien utilizó toda su fuerza:"¡Nueve brillos gélidos!"

Desde su mano salieron consecutivo nueve rayos de luz como relámpagos, pero de hecho, ¡eran nueve cuchillos!, y envueltos por un denso gas luchador de color púrpuro.

Los cuchillos volaron a gran velocidad con fuerza avasalladora.

En este momento crítico, sin embargo, floreció una masa de niebla púrpura, desde la cual apareció un plumero largo de pelo de callabo, y con un fuerte movimiento, los nueve chuchillos cambiaron su dirección y acabaron por caer ferozmente al lado de los pies de Ning Qi.