Sistema Más Fuerte de Matanza de Dragones/C69 Ajustar cuentas con el secretario general
+ Add to Library
Sistema Más Fuerte de Matanza de Dragones/C69 Ajustar cuentas con el secretario general
+ Add to Library

C69 Ajustar cuentas con el secretario general

Capítulo 69 - Ajustar cuentas con el secretario general

De las palabras de Zhang Long, Tong Guan escuchó algo, y lo preguntó curioso y asombrado:"¿Maestro Ning?"

"Nuestro maestro Ning es el refinador de píldora venerable del Salón de Cien Hierbas."

Zhao Hu dijo con orgullo.

"¿Qué? Ese tipo se hizo el refinador de píldora venerable del Salón de Cien Hierbas? ¡Que ridículo!"

La cara de Tong Guan estaba llena de incredulidad.

Zhao Hu se puso serio enseguida:"Jovencito Tong, aunque hemos venido a la orden del Maestro Ning para invitarlos, si continúa insultarlo, ¡no me echará la culpa de ser áspero!"

Palabras terminadas, estalló al máximo el aura del luchador espiritual de una estrella con que contaba, abrumándolo a Tong Tian.

Al ver esto, Tong Guan se adelantó de inmediato intentando atajar la fuerza imponente de Zhao Hu y le dijo riendo:"Hermano Zhao Hu, él todavía es un niño, por favor, perdone su mocedad......", también desbordaban de incredulidad sus ojos:"Es que tampoco confío mucho en las palabras de ustedes, ¿nos podrían dar unas pruebas?"

"Somos las mismas pruebas. Si el general Tong no nos creen, vaya a preguntarlo a la señorita Lv Liu."

Zhang Long dijo en voz apagada.

Tong Yingkong dijo con alegría:"Confío yo, les seguiré para allí."

"¡Hermanita! Ten cuidado, ¡quizá sea una trampa!"

Tong Tian miró incrédulo a Zhang Long y Zhao Hu.

Tong Guan le volvió una mirada furiosa. ¿Quién iba a tenderlos una trampa a dos simples luchadores con dos hombres del rango de luchador espiritual de una estralla como cebo?

Por otra parte, de tal fuerza carecían los enemigos de Tong.

Pensando hasta aquí, a pesar de un poco de incredulidad todavía, Tong Guan abrió la boca diciendo:"Yingkong, Tian'er, así que acompánen a ellos dos."

"¡Padre!"

Tong Tian se quedó reacio a hacerlo.

Sin embargo, frente a la expresión solemne de Tong Guan, no se atrevió a replicar, y se puso en camino siguiendo a Zhang Long y Zhao Hu, como si estuviera a punto de ser ejecutado.

En cambio, Tong Yingkong estaba bastante excitada, no dejó de preguntar a los dos seguidores de Ning Qi cómo su maestro se había convertido en el refinador de píldora venerable del Salón de Cien Hierbas, y a medida que se revelaban algunos acontecimientos, hasta Tong Tian comenzó a quedarse convencido de ellos.

Cuando vio a Ning Qi de nuevo, Tong Tian no puedo evitar exclamar sorprendido:"Ya alcanzas el rango de gran experto?"

Ning Qi asintió sonriéndose.

Tong Yingkong lo preguntó con curiosidad:"Jovencito Ning, ¿de verdad eres el refinador venerable del Salón de Cien Hierbas?"

Ning Qi volvió a asentir con su cabeza.

Tong Yingkong se alegró:"Entonces, si compro píldoras en el Salón de Cien Hierbas, ¿me darán descuentos?"

Al escuchar las palabras de su hermanita, Tong Tian sintió que, en un instante, ¡el hilo suyo era sumamente claro! ¡Alcanzó el punto clave sin ningún retraso! A Ning Qi dirigió una mirada llena de exceptación.

Ning Qi respondió sonriente:"Sí, puedo lograrlo. Pero primero, hoy vamos a pedir devueltos los diez mil taeles de plata que merecen a usetdes."

Tong Yingkong dijo alegremente:"Gracias, jovencito Ning. ¡Mi hermano llegó a decir que faltaste a la promesa!"

Tong Tian tocó su nariz con un poco de vergüenza.

"Tardé en volverme a la capital por unos asuntos triviales, de lo contrario, habría llegado mucho antes."

Ning Qi dijo riendo.

Poco después, los tres fueron juntos a la mansión del Marqués de Guanjun. Zhang Long y Zhao Hu habían querido acompañarlos, pero Ning Qi se lo impidió, debido a lo cual Tong Tian no dejó de sentirse preocupado por el camino, al final, cuando llegaron a la puerta, no pudo aguantar más e hizo la pregunta:"Ning Qi, ¿por qué no dejaste que Zhang Long y Zhao Hu nos acompañaran? El secretario general de la mansión Ning es del rango luchador espiritual de una estrella."

Ning Qi sonrió levemente:"¿Qué importa si se trata de un luchador espiritual de una estrella? El sirviente no es más que un sirviente. Hermano Tong, pierde cuidado."

...

"Secretario General Ning, vienen otra vez aquellos dos de la familia Tong, diciendo que quieren reclamar los diez mil taels de plata."

Un criado corrió a su lado y habló con él en voz baja.

Un destello de frialdad brilló en los ojos del Secretario General:"¿Todavía se atreven a venir?"

El criado respondió:"Es diferente esta vez, Ning Qi los lleva en persona para aquí."

"¿Ning Qi?"

El Secretario General Ning se levantó de su silla y, después de dar unos pasos, dijo fríamente:"Dile que no estoy aquí."

"¡Ehh! ¿Que están haciendo? "

"¡Qué atrevidos! Esta es la residencia del Secretario General Ning, ¡a nadie se permite entrar sin permiso!"

"¡Lárgarte! Dentro de la mansión, ¿dónde no puedo entrar yo? ¿Crees que aquí es el Jardín de Armadura?"

Ning Qi le zumbó inmediatamente dos bofetadas al secuaz del secretario, lo cual lo dejó salir volando de manera miserable. Ante esto, Tong Tian se alivió mucho, ahorita le pareció un buen chico a Ning Qi.

"Secretario General Ning, dado que estás aquí, ¿por qué dices que no?"

Ning Qi se le acercó con risas sombrías.

Echando un vistazo al subordinado que estaba tendido en el suelo, el Secretario General dejó aparecer un rastro de frialdad por su rostro, y depsués, miró hacia Ning Qi con un par de ojos entrecerrados:"Señorito Ning Qi, ¿le he ofendido a usted? ¿Por qué lanza golpeos tan fuertes una vez que venga?"

Ning Qi dijo sonriéndose:"La última vez que mi amigo vino aquí, sufrió treinta palizas indebidas, vamos a ver, ¿cómo se ajustarán las cuentas?"

El Secretario General Ning echó una risa burlona:"¿Indebidas? ¡Ridículo! Él quiso sobornarme, y por el prestigio de su padre Tong Guan, solo mandé darle treinta palizas."

Tong Tian soltó una maldición enseguida:"¡Mierda! ¡Es seguro que quiso dejarnos mal!"

Ninghai lo miró con frialdad:"¿Tienes el derecho a hablar en esta ocasión?"

"¡Tú!"

Tong Tian se enfureció.

"No eres más que un sirviente en términos de posición, ¿acaso se te olvida por los muchos años de altivez en la mansión del marqués?"

Ning Qi se burló.

Los ojos del Secretario General Ning destellaron de ira. A pesar de que era un criado de la mansión, poseía el rango de luchador espiritual de una estrella y nadie lo había tratado como una persona humilde, incluso Nangong Yu’er le tenía mucho respeto, y hoy, sin embargo, fue regañado de manera tan despiadada por un bastardo, ¿cómo no podría sentirse irritado?

Pensando en esto, él echó un resoplo con indiferencia:"Señorito Ning Qi, ¿hoy ha llevado a estos dos para defenderles la justicia? Lamentablemente, usted, ¿alcanza ya para ser mi oponente?"

Ning Qi dijo riendo:"Siempre que sinceramente pidas perdón, no te exigiré más responsabilidades. Creo que los Tong también van a perdonar lo que has hecho."

"Jajaja, qué ridículo."

El Secretario General saltó unas carcajadas con desdén, sus seguidores de confianza también se echaron a reír, como si lo que dijo Ning Qi fuera una fantasía que nunca iba a realizarse.

"¡Esclavo de perro! ¿A qué vienen las risas? Si no te doy hoy una lección, ¿de verdad crees que soy tan débil como hierba?"

Ning Qi se volvió hostil de repente, y no tardó en lanzarle un golpeo.

"¡Hum! ¿Te has atrevido a atacarme primero? ¡La vida te es tan aburrida a vivir! Hasta si el Viejo Maestro se informe de esto, ¡no me echará la culpa!"

Un intento de matanza cruzó por los ojos del Secretario General, quien, rodeado por el gas luchador púrpuro claro en un instante, pegó un puñetazo inmediato hacia su rival.

Pensó que la posibilidad de que este golpeo lo dejara a Ning Qi lesionado era práctamente total, justo en este momento, se oyó un rugido de dragón, y enseguida vio que la palma de Ning Qi brillaba con luz de plata, mientras sintió de pronto una gran fuerza bombardeando su cuerpo, que acabó por caer al suelo de manera bastante fuerte.

Con una bocanada de sangre escupida por la boca, miró atónito e incrédulo a Ning Qi: siendo luchador espiritual de una estrella, ¿por qué fue derrotado por un gran experto?, ¡y con un ataque solo!

"¡Qué poderoso!"

Tong Tian se quedó sumamente asombrado.

Mirando la espalda de Ning Qi, Tong Yingkong se halló casi en delirio, en sus ojos parecía que aparecieron dos signos de corazón.

Al notar que Ning Qi aún estaba dispuesto a dar pasos hacia adelante, los fieles del Secretario General Ning lo impidió el paso de inmediato.

See More
Read Next Chapter
Setting
Background
Font
18
Nunito
Merriweather
Libre Baskerville
Gentium Book Basic
Roboto
Rubik
Nunito
Page with
1000
Line-Height
Please go to the Novel Dragon App to use this function