C93 Visita al emperador en el palacio

Capítulo 93 - Visita al emperador en el palacio

El Viejo Maestro Ning lo fijó sonriente con una mirada en que no se escondía nada satisfacción.

Los patriarcas de las otras familias se hallaban muy celosos.

A partir de hoy, nadie se atrevería a subestimar a la mansión del Marqués de Guanjun.

"Viejo Maestro, estas píldoras nutritivas de espíritu son mi piedad filial a usted."

Ning Qi se las entregó las píldoras.

El Viejo Maestro Ning no se hizo nada artificial y lo aceptó. Extendió las manos para recogerlas y dijo con un rostro iluminado de alegría:"¡Muy bien, buen hijo!" Sus ojos recorrieron a Cao Dinglong, sin hacer ocultar el orgullo contenido en ellos.

Cao Dinglong estaba tan enojado que incluso la barba se levantó, pero no tenía ningún remedio.

Habían venido más de treinta personas de la mansión del Marqués de Guanjun. Entre ellas, excepto el grupo de Ning Hongtian que llevaba una expresión muy mala, los otros, sobre todo los de la nueva generación, todos mostraron una éxtasis incomparable por sus rostros.

Con más de trescientas píldoras nutritivas del grado mediano del nivel amarillo, aunque a cada uno le tocara diez, ¡podría ser una riqueza considerable!

Las miradas que dirigieron a Ning Qi pasaban de la indiferencia inicial al actual un poco de curiosidad y temor. ¡No se esperaba que un bastardo podría haber crecido tanto que hasta pudo hacer frente a un refinador maestro de la secta de Cien Hierbas! ¡Era probablemente el refinador más fuerte en el Imperio Qin y Tang aparte de los tres grandes maestros!

Cuando ellos pensaron en que Ning Qi disponía a la vez de la receta de la píldora de lucha alienígena y de capullo abierto, sus ojos se volvieron más fervientes. Ning Qi, después de todo, era hijo de la mansión del marqués, así que sus familiares podrían disfrutar del acceso privilegiado a las píldoras y tener un descuento, ¿no?

Ning Qi miró a Nangong Yu’er, y vio que ella también lo estaba mirando, con frialdad. Una sonrisa inevitablemente colgó de sus labios, que, por los ojos de Nangong Yu’er, era una burla enorme. Apretó los puños, con lo que las uñas se insertaron en la carne y ni siquiera se lo dio cuenta.

Después de eso, sus ojos llegaron a hombres como Ning Hongtian. Este tenía una expresión fría y no lo miraba. En caso de Ning Honghai, no tenía donde colocar su mirada, y cuando se encontró con el vistazo de Ning Qi, dio una risa seca. Cuando lo miró Ning Qi a Ning Hongdu, vio que su mirada no llevaba ninguna mala intención, por lo que le hizo un gesto con la cabeza.

"Todo el mundo, todavía tengo algo por hacer, les dejo ya."

Ning Qi juntó las manos ante todos, y después las llamó a personas como Duanmu Henian y regresó con ellos a su residencia.

Palacio imperial.

En el Trono de Dragón del estudio se sentaba un hombre de mediana edad. Estaba de nueve pies de altura y tenía un cuerpo aparentemente potente, que parecía contener una fuerza explosiva.

Sus cejas eran como espadas y sus ojos como estrellas. Aunque se notaban algunas arrugas en la comisura de sus ojos, se pudo observar su rostro hermosísimo cuando era joven.

¡El hombre era Qin Zheng! El actual emperador del imperio Qin y Tang, y también el hombre de fuerza más poderosa por todo el territorio -¡gran king de nueve estrellas!

Junto a él, Lin Tian, el gran eunuco del palacio imperial inclinó su cuerpo y le dijo suavemente:"Ning Qi ha ganado."

Un destello de sorpresa pasó por los ojos de Qin Zheng, quien sonrió luego:"Interesante, ni siquiera pudo derrotarlo Duan Linshu el discípulo de la secta de Cien Hierbas. Quizá sea otro talento para llegar hasta el gran maestro de refinación de píldoras. Ve a su mansión y dile que me visite al palacio. Quiero conocerlo."

Con un brillo abnormal cruzando por su mirada, Lin Tian hizo un gesto ligero con su cabeza:"Sí."

...

Mansión de Ning Qi.

Hai Dafu y personas como Duanmu Henian se comían y bebían con mucha alegría. La dama Zuo, mientras cuidaba de Lunita y Zuo Ling’er en el comer, no lo perdía de vista a Ning Qi, una vez que su vasito quedara vacío, se levantó para servirle el alcohol.

A la mesa también se sentaba el Tercer Señor Ning, que charlaba con la tía Mei relajadamente.

Tong Yingwei, bajo el mando de su madre, le dio a Ning Qi de vez en cuando un brindis llamándolo hermano Ning sin parar. Tong Yingkong estaba preocupada en el interior, pero ya que no era capaz de tomar el alcohol, no le quedaba ningún remedio.

Al observar toda la escena, Tong Guan exclamó sonriéndose:"Sobrino Ning, de momento ya no puede igualarse contigo la mansión del Marqués de Guanjun entera."

Bei Qinlong también dijo riendo:"Así es. ¿Actualmente a quién de la capital no le dan las ganas de entrar en esta puerta? Menos mal, he hecho hermano con el cuarto hermanito hace mucho, de lo contrario, tendría que entregar una tarjeta de visita y esperar largo tiempo para poder obtener su generosidad."

"Jajaja, segundo hermano, no me bromee. ¿A qué viene la generosidad mía?"

Ning Qi se rio a carcajadas.

Las palabras también dejaron a los otros se pusieran a reír.

Lv Liu dio una sonrisa ligera:"Ning Qi, ¿está bien que el Salón de Cien Hierbas recoja las primeras píldoras de lucha alienígena y de capullo abierto?"

Ning Qi dijo riendo:"Señorita Lv Liu, no hay problema, ya que me cuida mucho siempre. Sin embargo, no tengo la receta de la píldora de capullo abierto, la de lucha alienígena sí, y hay que contar con las hierbas espirituales del Salón de Cien Hierbas. "

La habitación se quedó en medio del silencio.

Lv Liu se sorprendió:"¿No tiene usted la receta para refinar la píldora de capullo abierto?"

Ning Qi asintió con la cabeza:"Exactamente. No la tengo por ahora, pero en el futuro tal vez sí."

Después de pasar un rato silencioso, se oyó primero la carcajada hecha por el Tercer Señor Ning, quien lo dirigió a Ning Qi una mirada de admiración.

"Cuarto hermanito, has logrado algo de la nada, ¿no? Si lo enteren ellos como Duan Linshu, a lo mejor vomitarán el sangre."

Bei Qinlong dijo riendo.

"No es tanto como para vomitar el sangre, pero se quedarán enojados por varios años, eso sí."

Ning Qi soltó una carcajada, sin ocultar el orgullo por su rostro.

Lv Liu dio un suspiro:"¿Qué haría usted si perdiera? Incluso con la presencia de mi padre, si no fuera capaz de sacar la receta de pastilla, sería encarcelado en la secta de Cien Hierbas."

Ning Qi sonrió levemente:"Porque, no voy a perder."

¡Una gran confianza se emitió desde su cuerpo, como si el que se sentaba delante de todos no era uno del gran experto de tres estrellas, sino un luchador king! Ante ella, incluso Lv Liu se sintió un poco avergonzada.

Pero el hecho había puesto de manifiesto que Ning Qi contaba con una habilidad de refinación mucho mejor que Duan Linshu. Lv Liu se sospechó que Ning Qi hasta estaba muy cerca de hacerse el refinador de gran maestro.

En realidad, Ning Qi ya era un refinador de gran maestro. No lo había informado a los otros de forma activa, y ellos, naturalmente, no lo consideraban como otro que un simple refinador maestro. Incluso ellos tres como Lv Wuchang no había pensado en eso, y además, Ning Qi no había hecho salir ninguna píldora que fuera únicamente refinada por uno de su nivel, por lo que nadie había descubierto la verdad.

"Señorito, está afuera un eunuco."

Zhao Er corrió rápidamente y informó.

"¿Eunuco?"

Ning Qi se puso de pie. Todo el mundo vinieron a la puerta y vieron que Lin Tian, junto con unos eunucos, les estaba mirando sonriente. Cuando recorrió a Lv Liu, incluso inclinó un poco su cabeza.

"Ning Qi, recibe el decreto."

Lin Tian dijo con voz clara.

Todo el mundo se inclinó ligeramente.

"Obedeciéndose a deseos de los santos, se anuncia el decreto imperial, que Ning Qi vaya al palacio imperial a dar una visita a Su Majestad. ¡Eso es!"

El edicto imperial fue muy corto. Lin Tian, al terminar de leerlo, le dijo a Ning Qi sonriendo:"Maestro Ning, felicitaciones. Los jóvenes que puedan obtener una audiencia con el emperador son muy pocos, que se pueden contar con una mano ya. Por lo visto, no será usted nada inferior al Marqués de Guanjun en cuanto a los logros."

"¿Marqués de Guanjun? Si no fuera por el Viejo Maestro, con su dones y cerebro, ¿cómo podría estar en condiciones de ser un marqués?" Ning Qi dio unas risas, mostrando por completo su desprecio por Ning Hongtian.

Todo el mundo sabía que Ning Qi estaba muy reñido con Ning Hongtian, sus relaciones eran como si el fuego se encontraba con el agua. Si Ning Qi había dicho esto en el pasado, probablemente hubiera quienes indignados al escucharlo, pero hoy en día, esas palabras eran ciertas. Si calculaban la influencia verdadera de Ning Qi, tal vez ya había superado a la de Nint Hongtian el Marqués de Guanjun.

Lin Tian dijo riendo:"Como se suele decir, el discípulo siempre sobrepasa a su maestro, y no hay un oro que no reluce."

"Eunuco Lin, me ha dado más alabanza de la que merezco."

Ning Qi rio.

Lin Tian dijo con una sonrisa:"Entonces Maestro Ning, ¿nos vamos ahora?"