C10 Capítulo 10

Li Qing era siempre muy cordial, mostrando la calidad profesional debida de una vendedora.

Ella no sabía si Wu Tian tenía el dinero para comprar esta mansión, porque no estaba segura de si le estaba haciendo una broma.

Sin embargo, ella trató a cada cliente con esta misma actitud. Aunque no querían comprarlo, todavía estaba muy paciente.

Liu Li que estaba por el otro lado, caminó al frente de Wu Tian y rió, diciendo: "¿Realmente estás pensando en comprar esta mansión de la orilla del río?"

"Por supuesto." Wu Tian asintió con la cabeza firmemente, el cual no parecía estar bromeando en absoluto.

"Esta mansión cuesta más de diez millones de yuanes".

"Lo sé."

"¿Querrías entonces pagarlo a través del préstamo hipotecario o pagarlo a una vez?" Liu Li cruzó sus brazos sobre su pecho con una sonrisa desdeñosa en su rostro.

"Voy a pagarlo a una vez".

Liu Li estalló la risa cuando lo escuchó.

El pobretón ante ella llevaba una ropa que valía decenas de yuanes, pero vino aquí para comprar la mansión, pagándolo a una vez.

Con su risa, los otras vendedoras también no pudieron evitar reír en secreto.

Después de reír durante mucho tiempo, Liu Li fingió ser cortés mientras extendía su mano derecha. "Por favor paga por aquí".

Después de eso, se retiró a un lado y se paró con algunas otras vendedoras para ver el resultado. Ella quería ver cómo este tipo pretencioso podría ofrecer tanto dinero.

"¡Por mi tarjeta!" Wu Tian sacó su tarjeta bancaria de su bolsillo y se lo entregó a Li Qing: "Por favor, ayúdeme con los trámites".

"¡De acuerdo!" Li Qing tomó la tarjeta bancaria con ambas manos. En este momento, estaba muy nerviosa, ya que no sabía si había dinero en la cuenta de la tarjeta.

Ella sacó su máquina POS y ajustó la cuota a diez mil millones antes de poner la tarjeta bancaria.

Liu Li y las vendedoras estiraron sus cuellos para mirar el resultado. Se apresuraron mucho a ver su ridículo.

Después de deslizar la tarjeta, la máquina POS pitió, lo que significaba que el pago fue exitoso, antes de imprimir el recibo de transacción.

Al ver que se había efectuado con éxito la transacción, Liu Li y las vendedoras estaban todas sorprendidas. No creían que realmente hubieran diez millones de yuanes en la tarjeta.

Las vendedoras no tenían ganas de reír ahora. Miraban a Wu Tian como si estuvieran mirando a un monstruo, con expresiones extremadamente exageradas.

No pensaron que el niño frente a ellas no fuera un tipo indigente, sino una persona rica con mucho dinero.

Para poder comprar una mansión de la orilla del río que valía diez millones, ¿qué rico debía ser él? Debería al menos tener más de cien millones de yuanes.

Li Qing también estaba muy sorprendida. Ella no esperaba que Wu Tian fuera tan rico. Además de la sorpresa, sentía también la alegría.

Era una vendedora de pasantía y nunca había reicibido un gran pago antes. Esto fue su primera vez de despachar un pago tan grande. Solo la comisión era comparable a varios meses de su salario.

"Sr. Wu, la transacción por la tarjeta de crédito ha sido efectuada con éxito. Aquí está su tarjeta bancaria". Después de deslizar la tarjeta, Li Qing le devolvió la tarjeta a Wu Tian con ambas manos. Sus brazos temblaban de emoción.

"¡Bien entonces!"

Wu Tian recogió su tarjeta bancaria y demandó con una sonrisa: "Date prisa para ayudarme con los trámites, lo antes posible".

Para ser honesto, tenía una buena impresión de esta chica frente a él, a diferencia de las otras vendedoras que lo habían ignorado.

Se sentía cómodo dejando que Li Qing ganara la comisión.

"Pues, haré el papeleo para usted ahora mismo". Li Qing estaba tan feliz que ella no podía cerrar la boca, riendo cuando comenzaba a gestionar el papeleo.

Las otras vendedoras estuvieron muy envidiosas de Li Qing. Ella consiguió una transacción grande con facilidad.

Especialmente para Li Liu, porque fue ella la que había empujado este gran pago a Li Qing. Solo pensar en ello, la hizo sentir arrepentimiento y angustia.

Si ella hubiera sabido que Wu Tian era tan rica, ella lo habría recibido con más cortés y sonrisa.

Después de un momento de sorpresa, unas vendedoras lo rodearon, cambiando su actitud anterior y adularon a Wu Tian.

Si en ese momento sabían que Wu Tian era una persona rica, sin escrúpulos, incluso por muy audaz que fueran, todavía no se atreverían a ofenderlo.

Después de terminar los procedimientos, ya llegó la tarde. Con las cálidas despedidas del personal de ventas, Wu Tian dejó el centro de ventas con su certificado de propiedad. Desde aquel momento, se convirtió en un hombre que poseía una casa.

Después de que compró la casa, llamó a Long Yun y le ordenó que ella comprara muebles.

Long Yun fue de hecho la secretaria elegida por el abuelo de modo que ella arregló la casa nueva limpiamente y correctamente el mismo día.

Wu Tian se mudó a su nueva casa durante la noche. Mirando la enorme habitación llena de muebles nuevos y a la hermosa secretaria, se sentía extremadamente cómodo.

Después de revisar todas las habitaciones, Wu Tian finalmente se detuvo en la sala de estudio.

Mirando las estanterías llenas de libros sobre economía, no pudo evitar fruncir sus cejas y preguntó: "¿Por qué hay tantos libros en el estudio?"

"Esta es la orden del antiguo maestro. A pesar de todo, tendrá que administrar cien mil de millones de yuanes en activos en el futuro, y necesita un conocimiento profesional en cuanto a la administración". Long Yun explicó con una cara sin expresión.

"Pero …"

"El maestro también dijo que él quería que yo asumara la responsabilidad de supervisar tus estudios".

"Eso no será necesario". Wu Tian se rayó la cabeza y miró a Long Yun con un ligero dolor de cabeza. "Con una gran belleza como tú que se queda aquí, ¿cómo podría estar de humor para estudiar? Deberías irte, aprenderé lentamente por mí mismo".

"¡Bien!" Long Yun sonrió un poco embarazosamente antes de volverse y de salir.

Wu Tian se desplomó en la silla y dejó escapar un largo aliento. Parecía que heredar cien mil de millones de yuanes no era tan fácil como lo que pensaba.

Pronto, se animó y comenzó a leer en serio los libros.

Solía

ser muy humilde. Debía arreglársela de enriquecerse y hacerse fuerte. Él no podía dejar desilusionado a su abuelo.

Después de leer un libro, una vez más pensó en esa chica de streamer por internet llamada Dama Enmascarada.

La plataforma a la que se encontraba la chica se llamaba TV de Mariscos, y era muy pequeña. Había pocos streamers famosos, pero la plataforma en sí estaba muy bien hecha.

En ese momento, de la lectura, había recibido alguna idea. Si pudiera invertir un poco en una plataforma de emisión en vivo como esta, podría ser capaz de ganar mucho dinero.

Pensando en la TV de mariscos, Wu Tian no se fue a dormir hasta muy tarde.

Al día siguiente, se despertó y se fue a la escuela. Encontró a Zhao Yang y Li Meng en la entrada del aula.

Después de la escena brutal de ayer, había algunos moretones en la cara de Zhao Yang. Cuando vio a Wu Tian,

su cuello se encogió y sus ojos se llenaban de miedo.

Lee Meng también se asustó de modo que esquivó el encuentro con Wu Tian.

Los dos fueron asustados por los cuatro guardaespaldas de ayer. Incluso en ese momento, todavía tenían miedo persistente.

Wu Tian no dijo nada. Miró a los dos antes de entrar en el aula.

"Yo …"

Los labios de Li Meng temblaron. Observó la espalda de Wu Tian mientras caminaba cada vez más lejos. Al final, ella no dijo lo que quería decir.

Solo en ese momento entendió que Wu Tian,

que la había estado persiguiendo antes, se había ido para siempre.

Por aquel entonces Wu Tian ya no estaba interesado por ella, pero ella no podía hacer nada.

En el momento en que Wu Tian entró en el aula, los estudiantes comenzaron a hablar entre ellos. Todos hablaban de la relación entre él y Liu Yueyao.

Cuando vieron a Wu Tian en el auto de Liu Yueyao, estaban extremadamente envidiosos.

Cuando todos lo estaban discutiendo, la repentina apariencia de Mu Ran asustó a todos los estudiantes y se pusieron a callarse.

Mu Ran fue la maestra más brutal en todo el departamento, y fue llamada en secreto como un diablo por sus alumnos.

Nadie se atrevió a distraerse durante sus lecciones.

Mu Ran era iracunda, pero muy bonita. Llevaba un vestido largo, y su belleza no podía ser descrita en palabras.